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Los chicos del Turia Extreme en el encuentro de Categorías Menores

Publicada el 11 julio 2005 (hace hace más de 19 años)


Tras día y medio de viaje, con todo tipo de experiencias inolvidables, incluidas viaje en tren cama sin cama para los técnicos (“usease”, para mí, mayormente), y tras explicarle a mis niñas que no pueden dormir en el mismo camarote gracias a la incompetencia de nuestros buenos amigos de RENFE; conseguimos, una vez pasadas las 5 horas de estancia gratuita en Algeciras, coger el Ferry a Ceuta. Desde que montamos en el barco, los niños ya comienzan a hacer sus amistades con el resto de chavales de otras comunidades, y los técnicos comenzamos a acercar posturas y a hacer comparaciones inter-comunidades Vamos, lo que viene siendo “arreglar el triatlón del país".


Nada mas llegar a Ceuta y conocer a Juan (el sufrido organizador y anfitrión), nos desplazamos al acuartelamiento del RACA 30, un cuartel en toda su expresión, cuyos barracones, literas y letrinas nos acogerán del domingo al jueves: todo un poema. ¡Ahh!, y las duchas en otro pabellón. ¡¡¡Esto promete ser toda una experiencia!!! Tomamos contacto esa primera noche con la fría agua de las duchas, con barro en el caso de las chicas (esto parece un balneario) y con la cena de cuartel, que para los niños resultó asquerosa y los mayores, pues bueno, las hemos visto mucho peores, ¡¡que diablos!!


Ale, una vez bien cenados y cansaditos del viaje, ¡¡¡a dormir!!! Si, ¡eso es lo que creíamos nosotros! Los niños cambiándose de habitación y montando jaleo hasta las tantas de la madrugada, menos mal que yo aún tenia cansancio del tren-asiento.


Lunes:


A la mañana siguiente desayuno, amenazas de muerte si se repite lo de la noche anterior (que se repetirá) y comienzo de los entrenamientos. Dos grupos, infantiles y alevines y dos grupos de entrenadores, un grupo hará carrera con los infantiles y natación con los alevines y viceversa.


A mí me toca natación por la mañana con los infantiles y carrera por la tarde con los mismos. ¡¡¡Qué bien nadan estos chicos, y que bien corren algunas chicas!!! En fin, aunque les machacamos un poquito responden de maravilla. Os podéis imaginar, mucha técnica, mucho relevo, infinidad de juegos y mucho cachondeo entre los técnicos.


Al mediodía, mientras los niños descansan tras la siesta y por la noche, mientras comienzan a montar el follón, los técnicos celebramos las "reuniones técnicas", que son como  reuniones de alcohólicos anónimos, pero el tema de conversación es el triatlón. Qué largas son estas reuniones, pero qué amenas, ¡¡¡como nos gusta discutir!!! Cuando logramos poner fin a la reunión (que no ponernos de acuerdo), a dormir. Los niños a lo suyo, que no es dormir precisamente.


Martes:


Cambiamos el entreno matutino de natación por piragüismo, y hacemos carrera y piragüismo en un embalse muy bonito (el Renegado, creo). Chapuzones varios con la piragua (la excusa era la piragua) y momentos divertidísimos entre técnicos y niños que comparten piragua y que son incapaces de subir a la misma.


Por la tarde, ante la marea de medusas que nos invade en la playa, cambiamos la sesión de agua a la piscina y organizamos una competición de natación con paso de boyas, relevos,  y otras actividades, para ver si cansando a los niños dormían bien. Ni por esas...


¡Ah! por cierto, otra reunión técnica hasta las tantas...


Miércoles:


Nos levantamos con ganas tras una noche un poco más tranquila (las amenazas de muerte han surtido efecto o bien el cansancio hace mella) y nos vamos para el parque marítimo en el que nos esperan unos lagos-piscinas de agua salina y gélida para hacer el entrenamiento matutino. La cercanía con la multitransición del jueves y la pereza por el agua fría hace que muchos ni se planteen el entrar al agua, y que otros tengan que ser poco menos que arrastrados hasta allí, pero al final todos hacen un mínimo entrenamiento y después disfrutan de las instalaciones tomando el sol, jugando a baloncesto, fútbol... mientras algunos técnicos disfrutamos de nuestro machaque diario (que lujo entrenar con Cristina Azanza  y con Sergio de Torres, aunque me duren aún las agujetas). Por la tarde, todos con nuestra camisetita blanca regalo del encuentro, nos vamos de ruta turística por Ceuta, y damos una vuelta en barco para verla desde el mar. Después recepción en el Ayuntamiento para que los políticos se den un baño de multitudes y nosotros veamos lo que se apoya a este deporte desde el Gobierno Autónomo ceutí, todo un ejemplo a seguir.


Por la noche, los nervios de la competición hacen que algún vikingo (que no niño) que ya llevaba días alborotando a la masa, provoque algunos altercados con lanzamiento de objetos a coches que hacen necesaria una reunión de urgencia. Sofocada la rebeldía, arrepentidos los culpables (o cuando menos fingiendo arrepentimiento) y habiendo recibido el merecido castigo, nos vamos a la cama... ¡NOOOO! a la reunión técnica, que en este caso viene calentita con las distancias de la multitransición del día siguiente, o este tema se trato el día anterior... bueno lo cuento igual. El caso es que la distancia propuesta para los infantiles era 200-1000-200-1000-200-1000 siempre natación-carrera... y algunos técnicos nos posicionamos en que la distancia de carrera era excesiva. Tras mucho tiempo de discusión, decidimos dejar 100-300-100-300-100-300 para los alevines y 200-500-200-500-200-500 para los infantiles.


¡Uyyy!, casi me lo dejaba, ¡¡¡esta fue la noche de la fiesta!!! Nos fuimos a una discoteca a bailar hasta reventar, a ver si por una vez conseguíamos cansar a los nanos y nos dejaban dormir, pero lo único que conseguimos fue cansarnos nosotros de hacerles bailar. Qué exhibición la de Toni, el entrenador de Gandia, ¡en la pista de baile dando un recital y enseñando a todo el que había por allí como se baila!


En nuestro equipo la discoteca se cobra las primeras bajas: una de las gemelas, con fiebre y con dolor de oído parece que se perderá la competición del día siguiente, y por si esto fuera poco, su hermana se tuerce el tobillo bailando y la acompaña en el dique seco, ¡¡¡a este paso la multitransición me toca hacerla a mi!!!


Bueno a las 12 se termina la fiesta y tras intentar arrancar a los niños de la discoteca, a la que se habían pegado como un chicle, los dejamos en la camita y a dormir como angelitos que mañana se compite. ¡¡Como les gusta la competición a estos chicos!!


Jueves


Desayuno con nervios por la competición, y primeras bajas dentro de nuestras filas. Se confirman la de las gemelas, no se si por fiebre, por esguince o por solidaridad. La pequeña Ángela, en el ultimo momento, se echa atrás por el frió, el miedo escénico, o simplemente por que no le apetece. Su madre y yo intentamos convencerla, pero visto que no quiere, yo me retiro, dejémoslo para su madre... Al final solo corren 3, y esto a quien le importa, a mí por lo menos no, se han viciado todos con el triatlón, han disfrutado de 4 días de convivencia, han aprendido mucho y esta competición simplemente es otra lección mas, hay que tratar de ser el mejor que uno pueda ser, aunque te ganen. Ahí esta África para demostrarlo, llega ultima, pero radiante porque ha conseguido terminar, ¡si es que las infantiles andan como motos!


Dani y Víctor también hacen un digno papel. Dani llega en mitad de la clasificación, y Víctor un poco mas adelante. Pero es lo de menos, los dos muy contentos y con ganas de más. Eso es lo que importa. Al final diplomas y medallas para todos, placa conmemorativa para la FATRI y agradecimientos para todos. Y sobretodo una semana, más tarde y más reposado de la odisea de viaje, con ganas de repetir e infinitamente agradecido y satisfecho por habernos dado esta oportunidad de convivir, aprender y disfrutar con un maravilloso equipo de gente y con la excusa de un deporte que cada día enamora a mas gente, y hace que sea para algunos una manera de vivir.


Gracias a todos.


Tomas Martín Pérez
Club de Triatlón Turia Extreme
-Teruel-



 


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